viernes, 25 de septiembre de 2015

EL COWBOY DE GUANTE NEGRO




()

Tu hermano se retorcía con gestos de dolor, se tiraba al suelo rodando hasta quedarse con las piernas estiradas y los brazos en cruz sobre el asfalto, inmóvil, con los ojos muy abiertos. Soplabas sobre el cañón, te enfundabas la pistola en la cintura y silbabas la melodía de una película del oeste andando sobre los talones. Le dabas la mano, él se levantaba de un brinco y os ibais a merendar tan campantes.

Me gustaba que dejaras de ser el chico serio de la vecina de enfrente y te transformaras en un villano de ojos grandes y puntería certera. Con aquella pistola te sentías poderoso. Sólo tenías que decir lo que querías para que te obedecieran. 

()

El cowboy de guante negro
Un relato de Loli Pérez


Este relato al completo podréis leerlo en nuestro libro: 

Maneras de desandar el tiempo. 
Punto y seguido 2015.



Nota: Maneras de desandar el tiempo se presentará el día 1 de Octubre en el Ateneo de Málaga, sito en calle Compañía núm. 2

2 comentarios:

  1. ¡Muy bien, Loli! En segunda persona y con los recuerdos de infancia.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Javier!!
    Un ejemplar ya va caminito de Vallecas.

    Abrazos

    ResponderEliminar