viernes, 30 de diciembre de 2016

2017



FELIZ y LITERARIO 2017


LES DESEAMOS LOS INTEGRANTES DE PUNTO Y SEGUIDO



Punto Y Seguido


miércoles, 30 de noviembre de 2016

LEER ANTES DE VIAJAR


En las vacaciones de verano a muchos se les despierta el deseo de leer, o mejor dicho, el tiempo para leer y disfrutar de las lecturas. Algunos se embarcan en largas novelas, en los clásicos pendientes, o en las novedades. Pero en este caso lo que me interesa son las lecturas previas a los viajes. No hablo de las guías que nos acompañan, cada vez más, como si ya no bastara con un plano para evitar perderse. (Antes Lonely Planet era un incentivo para emprender un viaje. Uno leía esas guías, veía sus documentales, y deseaba conocer ese lugar. Ahora parece que no podemos movernos sin las guías. Y mucho menos sin un GPS…). Me refiero a los libros de narrativa, poesía o ensayo que transcurren en una ciudad, en un país, en una región, y sirven para conocer mejor a su gente y a su cultura actual o previa. Relatos que caminan por espacios que luego pisaremos, o autores cuya voz es la voz de su pueblo.


      Como es obvio, todas las narraciones nos pueden llevar de la mano a un lugar, pero muchas están centradas sólo en los personajes, y la ciudad está diluida en la narración. O no está. O es un lugar inventado. La narrativa en la que estaba pensando es la que uno puede disfrutar al identificarla con las calles o con la cultura. Y con ese pensamiento di con un ensayo de Michel Onfray, doctor en Filosofía, que tiene libros muy controvertidos, como el Tratado de ateología, que aún no leí. En este caso se trata de TEORÍA DEL VIAJE Poética de la geografía.


     Entre todos los temas que toca Onfray, desde querer el viaje hasta elegirlo, nos habla de los que alguna vez fueron lejanos destinos, que estuvieron en los sueños y el imaginario de muchos y que ahora, gracias a las comunicaciones (él defiende los aviones), se encuentran cerca, a unas horas de nuestra casa: la India de Marco Polo, el África de René Caillié, el Oriente de Nerval, la Oceanía de Bougainville. ¿Qué capta nuestra atención? A veces una palabra, el nombre de un país, de un río, de un volcán. «El cuerpo almacena imágenes transformadas en íconos», nos dice, «De ahí la necesaria celebración del libro (…) en la constitución de un imaginario eficaz y rico.» Y con esto defiende al libro en detrimento del video, (realidad simplificada): «Mejor las novelas de Julio Verne o las de Paul d´Ivoi…»

Fotografía de Max Seigal

     Para aumentar el deseo por conocer un lugar, lo mejor son los libros, sobre todo la poesía, nos dice: «El poeta transforma la multiplicidad de sensaciones en un depósito reducido de imágenes incandescentes destinadas a ampliar nuestras propias percepciones». La China de Claudel, el Tibet de Segalen, las Antillas de Saint-John Perse, el Ecuador de Michaux, el México de Artaud, la Europa de Rilke, e incluso aquellos que nos hablan de su propia ciudad, como Apollinaire de París, Pessoa de Lisboa o Borges de Buenos Aires.


    Tras su defensa del Poema, y también del Atlas, recae en la Prosa, aunque la considera más diluida que el Poema, y en la Guía, totalmente utilitaria. Su libro apunta al viajero, y nos da a todos la posibilidad de serlo a pesar de contar, a veces, con sólo unos pocos días para conocer un lugar. Se trata de la mirada, de inventar la inocencia, encontrar la propia subjetividad y atrapar la memoria. Por todos estos puntos nos pasea Onfray, como un camino para el autoconocimiento a través del viaje, y el libro tiene un lugar primordial en ese camino.

Foto de Helen Warner

    «La prosa del mundo se puede descifrar, (…), a la manera del agua, de la tierra, del fuego, de las nubes, de los sueños, de las fantasías, de un granero, de una casa, de una caracola, de la llama de una candela o de un fuego. O de un poema. Pues el poema del mundo requiere sin cesar de propuestas de desciframiento.»

    Les recomiendo un enlace, porque no hay mejor lugar que una librería para encontrar el libro adecuado antes de viajar, y aquí hay diez especializadas en viajes.


Andrea Vinci
Punto y Seguido

Primera ilustración de Pawel Kuczynski


martes, 25 de octubre de 2016

DIARIO DE UN MAL AÑO. J.M.COETZEE

Diario de un mal año de J.M.Coetzee es un libro difícil de leer por su fragmentariedad y por el fuerte peso de la reflexión y el pensamiento frente a los elementos meramente narrativos.  Exige un lector empecinado pero que sabe que va a ver recompensados el esfuerzo y la insistencia. En correspondencia, se observa  la complejidad de su escritura, un trabajo arduo parecido a la construcción de  un puzzle de muchas pequeñas piezas con perfiles equívocos.


 La estructura se sustenta en una trama escueta y un aluvión de opiniones que se articulan en el trenzado de tres discursos diferentes que se van alternando en cada página. Es necesaria la aclimatación a estas tres voces que nos parecen disonantes en las primeras páginas  hasta que empezamos a distinguir los ecos, los acompañamientos, la música armoniosa que componen en su significado.

La  parte más extensa es la transcripción de una serie de textos argumentativos sobre la realidad, "opiniones contundentes" que se suponen formarán parte de un libro miscelánea que han encargado a su protagonista, el escritor C., trasunto de Coetzee . A este discurso más expositivo, aunque no exento de matices narrativos, se unen las voces de Anya y Alain, que forman con C. un triángulo sentimental que opera tan solo en el plano virtual o del deseo, pero que produce efectos en el plano real de los personajes dentro de la trama. A través de Anya se introduce la relación de ella con el viejo escritor, una relación supuestamente laboral (ella mecanografia las opiniones de C. para el libro) pero que soterradamente tiene muchas más implicaciones. La parte de Alain mueve la intriga narrativa y nos da la réplica a las opiniones de C.

 Con estos tres hilos de diferente grosor y tonalidad, va tejiendo Coetzee una novela autoficcional que juega con fechas, circunstancias, acontecimientos que el lector ha de conocer (C. tiene un importante galardón literario, es sudafricano, vive en Australia..) y los mezcla con detalles que no cuadran (la edad del protagonista, la ciudad de residencia...).El efecto paradójico es un reforzamiento de la sensación de verosimilitud no solo del personaje C. sino también de sus opiniones y del resto de los elementos de la trama , como los otros dos personajes, presumiblemente ficcionales. Estos juegos entre ficción y realidad se han convertido en una de las marcas del último Coetzee, como en su autobiografía  a través de entrevistas ficticias, Verano.


Otro aspecto interesante de la novela son las referencias metaliterarias, la reflexión sobre el hecho literario, su necesidad y su función, que plagan el texto.
Por ejemplo C. le dice a Anya:
"Una miscelánea no es como una novela, con un principio, un medio y un fin. No sé cuánto va a durar" .
"¿Una novela? No, ya no tengo la fortaleza necesaria. Para escribir una novela tienes que ser como Atlas, cargar con todo un mundo en tus hombros y sostenerlo durante meses y años, mientras todos tus asuntos se resuelven por sí mismos. Es demasiado para mi estado actual"
Anya, como la voz del lector común opina:
"Me gusta un buen relato, le dije fríamente. Ya se lo he dicho. Un relato de interés humano con el que pueda identificarme".

En cuanto a temática, la novela se ocupa de los asuntos habituales de la narrativa de Coetzee: la vergüenza, la vejez, el racismo, el comportamiento humano frente a los animales...Se diría que tiene un afán totalizador, enciclopédico, partiendo de la propia disposición de los capítulos en forma de artículos de un tratado didáctico. Abarca desde asuntos clásicos del pensamiento (Sobre la democracia, Sobre los orígenes del Estado, Sobre las aves del aire...) hasta temas completamente modernos (Sobre la Bahía de Guantánamo, Sobre la gripe aviar, Sobre el diseño inteligente...).

Teniendo en cuenta que la novela se publicó en 2007, hace casi diez años y antes de que la grave crisis mundial que estamos viviendo hubiera dado aún por completo la cara, es destacable la agudeza del pensamiento de Coetzze, su capacidad de leer lo que venía. Por ello, por su altura intelectual y su sinceridad y compromiso con la realidad histórica, creo que Diario de un mal año no es como diría C. "una oportunidad de refunfuñar en público", sino una cosecha de opiniones excelentes de un buen año literario de Coetzee.

Inmaculada Reina
Punto y Seguido

martes, 18 de octubre de 2016

UN CUARTO PROPIO: PREMIOS LITERARIOS Y ESCRITORAS DE POSGUERRA




Ayer, 17 de octubre, con motivo de la conmemoración del primer Día de la Escritora, instaurado por la Biblioteca Nacional para reivindicar el protagonismo de las autoras hispanoamericanas, en el CAL (Centro Andaluz de las Letras), Ana Cabello nos deleitó con una estupenda charla sobre la incidencia de los premios literarios en las escritoras de posguerra, y como estos significaron «un cuarto propio».



         La guerra dejó a España huérfana de escritores, a lo que luego se sumaría el estigma de la censura. Para fomentar el resurgimiento cultural se instauraron varios premios literarios, entre ellos el Nadal en 1944, que nos deja la primera «sorpresa» para una época extremadamente machista: gana la novela Nada de Carmen Laforet, una joven de veintitrés años, desconocida. Este fue el puntapié inicial de la carrera por la visibilidad de las escritoras españolas, escondidas tras los delantales de cocina y la sonrisa de buenas esposas.

Carmen Laforet

         Las que continuaron con esta carrera le deben mucho a Laforet por haberse atrevido y, sin lugar a dudas, a aquellos «limpios» concursos literarios que elegían las obras antes de abrir las plicas… Aún así muchas tuvieron que ocultarse tras un pseudónimo masculino, como las escritoras del siglo XIX. Nada fue un hito en el empoderamiento de aquellas mujeres, que fueron atacadas, abiertamente, en los medios gráficos, por su osadía a dejar de ser «sólo señoras de su casa». Porque los premios literarios, entre 1944 y 1959, dieron muchas alegrías a las escritoras, y eso clavó una espina gorda en el machismo español. Carmen Laforet, Ana María Matute, Carmen Kurtz, Elena Quiroga, Carmen Martín Gaite, fueron algunas de las que ganaron esos premios: Nadal, Planeta o Elisenda Montcada. Abrieron el camino a las que vendrían después, una generación apoyada por el feminismo.


Aquellas mujeres se alegraban con poder escribir en el ítem de su ocupación: escritora, en lugar de sus labores. Soportaron múltiples ataques de los incrédulos hombres escritores, que tuvieron que lidiar con la igualdad que significa contar en sus currículos con el mismo galardón. Pero, para no revolver demasiado las aguas, debían mimetizarse en el medio para no envalentonar a la tan temida censura. Como demostración, Ana Cabello nos trajo fotos de las revistas de la época: las escritoras recibiendo los premios junto a sus maridos, dándole de comer a sus hijos, aclarando que no descuidan su casa, etc. Y tras ellos la sorna extrema de revistas como La Codorniz que, para hacer hincapié en los muchos premios literarios que se llevaban las mujeres, sobre todo el Nadal, creó el Premio Dedal…

Ana Cabello

El corolario es un profundo agradecimiento a esas escritoras que nos abrieron el camino, y a los premios literarios, que las dejaron ser.
Andrea Vinci
Punto y Seguido


PD: Hoy, en El País, se puede leer esta nota titulada: Nosotras escribimos. En ella aparece lo siguiente:

«Si una palabra vale a veces más que mil imágenes, algunas cifras valen en ocasiones más que cien mil palabras. En este sentido, los datos de la presencia de mujeres en las altas instituciones y en las listas de grandes galardones literarios conforman un poema de realismo sucio. Solo 10 mujeres en 300 años de historia han ocupado un sillón de la Real Academia Española de la Lengua. El Premio Nacional de Narrativa, instaurado en el ya democrático año 1977, solo ha distinguido a dos autoras —Carmen Martín Gaite y Carme Riera— en sus 38 ediciones. Solo ha habido 4 mujeres de 38 Premios Cervantes y 14 mujeres entre 113 Nobel de Literatura.»



martes, 11 de octubre de 2016

UNA SUERTE PEQUEÑA


Llegué a este libro por recomendación de una amiga que había leído Elena sabe, de la misma autora: Claudia Piñeiro, y le había gustado tanto como a mí. Piñeiro tiene varias novelas que fueron llevadas al cine: Las viudas de los jueves, Tuya, Betibú, Las grietas de Jara. Películas que no vi. Libros que no leí. Tal vez no quería perder el encantamiento de Elena sabe… Frente a la recomendación me hice con Una suerte pequeña, y aquí les contaré mi parecer.


Las viudas de los jueves

      La primera mitad del libro me pareció estupenda. Piñeiro mantiene el suspense y nos atrapa. A la mitad del libro nos enteramos del porqué de toda la historia y ahí, por lo menos para mí, se cae un poco la narración. Pierde fuelle. Es la misma sensación que sentí con Mañana en la batalla piensa en mí, de Javier Marías. Salvando las distancias.

Foto de Martín Lucelose para La Nación

        Se trata de un libro de fácil lectura, aunque profunda en su tema, donde hasta la primera mitad aparecen dos voces de narrador. Mayoritariamente es la voz de una mujer a la cual se la conoce por tres nombres diferentes: Mary Lohan, Marilé Lauría y María Elena Pujol (situación que crea intriga), y que cuenta como en un diario íntimo, aunque ella lo llame bitácora de viaje. La otra voz repite casi el mismo texto, que avanza y se repite, y que hasta la mitad desconocemos quién es el autor. Con esa voz comienza el libro:

«La barrera estaba baja. Frenó, detrás de otros dos autos. La campana de alerta interrumpía el silencio de la tarde. Barrera baja, alerta y luz roja anunciaban que un tren llegaría. Sin embargo, el tren no llegaba. Dos, cinco, ocho minutos y ningún tren aparecía. El primer auto esquivó la barrera y pasó. El siguiente pasó y tomó su lugar.»


En una entrevista que le hicieron a la autora en Ciudad Equis, de La Voz del Interior, sobre esta novela y su tendencia al suspense, dijo:

«Es una suerte de homenaje a la narración oral. Hay gente que cuenta algo más o menos interesante, y uno escucha atento, esperando a que llegue al final. Me gusta ese tipo de relato, en el que uno cuenta una historia y el otro espera que sigas. Puede pasar en un policial, o, también, en una novela psicológica como ésta. Me gusta dosificar la información, usando un lenguaje de determinada manera, para que el otro me quiera acompañar en esa historia que estoy contando.»

Foto de Martín Lucelose para La Nación

Hay capítulos que me remiten al cuento, como el que habla de los murciélagos. La narradora enlaza el pasado y el presente para transmitirnos intriga y soledad, dolor y miedo. El formato de diario íntimo justifica, en cierta manera, la repetición de los sentimientos, de la historia.

La autora nos hace pensar en la suerte, en cómo enfrentar el dolor y torcer la pulseada. Nos hace ponernos a favor. O en contra. Depende de cada uno… La primera mitad del libro vale la experiencia de adentrarnos en él. Es imposible quedar indiferentes.



«Me pregunto una vez más si habrá sido una buena idea haber venido. Por momentos tengo la sensación de que todo acabará muy mal, que no podré evaluar al colegio Saint Peter por mi propia incompetencia y que mi viaje terminará siendo un escándalo.»

Andrea Vinci
Punto y Seguido


lunes, 26 de septiembre de 2016

NERUDA, LA MEJOR PELÍCULA DE 2016

Y ustedes se preguntarán cómo a la altura de septiembre se puede saber cuál será la mejor película de 2016 y sobre todo teniendo en cuenta que nos encontramos a las puertas de un otoño repleto de títulos con apariencia de "importantes". Bueno, yo solo me atengo a la realidad, una realidad forjada por muchos años de ver películas: Neruda es y será la mejor película de 2016.


(De acuerdo, eso de arriba es una boutade, que sea o no la mejor no significa gran cosa, pero había que empezar de alguna forma para tratar de engancharles.)

Neruda (Pablo Larraín, 2016) es una gran película, eso sí es incuestionable, la vi la tarde de su estreno y me pareció un desperdicio que solo estuviéramos cuatro espectadores en la sala, viernes, sesión de 20,00h. Tanto esfuerzo, tanto mimo, tanta pasión solo para cuatro espectadores. Pero el mundo del cine es así, la industria es así. Una pena. No importa que contenga excelentes interpretaciones, ambientaciones, diálogos, música, hechos históricos, juegos entre la realidad y la ficción, lo que descubres y lo que insinúa. No importa que se trate de una película moderna e innovadora y a la vez tremendamente clásica, que aúne en su trama retazos de Borges y de Cortázar, de Buñuel, de Woody Allen, de Vila Matas o de Patrick Modiano. La cosa es esa, si no te agarra una multinacional, alguna filial del supermonopolio de la distribución mundial de películas, no tienes nada que hacer: cuatro espectadores.

Esperemos que el señor Pablo Larraín siga haciendo su cine, siga sorprendiéndonos en cada nueva obra. Me dejó tocado su terrorífica El Club (2015), me traspasó su esperanzada y luminosa No (2012) tras de la grisura demoledora de Post Mortem (2010).
Si pueden vayan a verla, es un juego y es real, es abrumadora y divertida y también sencilla y emocionante, muy bien escrita y mejor hablada. Su director, el señor Larraín, Pablo, dice esto refiriéndose a ella:
"Neruda nace de la absoluta libertad de crear ese accidente que es una película. El cine es misterio, mis actores son misteriosos y permiten que el espectador viaje a través de ellos. Al final he hecho un filme sobre un solo personaje: porque tanto poeta como policía devienen en uno".

No les cuento nada más, solo insistirles: Dejen todo lo que estén haciendo y corran a verla.



Miguel núñez ballesteros
Punto y seguido


martes, 20 de septiembre de 2016

ESCRIBIR UNA NOVELA 90mil pals. 300 págs.




90 MIL PALABRAS = 300 PÁGINAS

Fijaremos como objetivo principal escribir una novela de 90.000 palabras  que nos resultaran unas 300 páginas siguiendo un modelo de escritura aproximado de:

10 Palabras x Línea
30 Líneas x Página
300 Palabras x Página

300 Páginas = 90.000 Palabras


DIVIDE Y VENCERÁS


Para la trama general usaremos la típica estructura aristotélica de tres actos de Planteamiento, Nudo y Desenlace.

Planteamiento - Nudo - Desenlace

Y asignaremos un porcentaje del 20% del total al Planteamiento, un 60% al Nudo y el 20% restante al Desenlace.

Planteamiento   -   Nudo  -   Desenlace

       20%               60%            20%

           60 pág.            180 pág.       60 pág.


A su vez el Nudo principal lo dividiremos en tres partes de un 20% cada una.

Planteamiento      -       Nudo        -      Desenlace

       20%               20%  20%  20%            20%
  
            60 pág        60 pág. 60 pág.  60 pág.       60 pág.


Y tendremos divida la Novela en 3 Actos de 60, 180 y 60 páginas respectivamente y 5 grandes subdivisiones de 60 páginas cada una que usaremos como etapas de la aventura y que en esta ocasión denominaremos como:

La Llamada – Nuevo Mundo – Iniciación – Muerte – Resurrección


Cada una de las 5 grandes divisiones anteriores las volveremos a dividir en 6 subdivisiones de 10 páginas cada una. Las 6 subdivisiones corresponderán a un estado inicial, un suceso detonante del conflicto, unas complicaciones o conflicto, unas medidas correctoras, un clímax del conflicto y un estado final.

Est. Inicial - Suceso - Complicaciones - Medidas - Clímax - Est. Final

Este patrón lo repetiremos en cada una de las cinco etapas de nuestra aventura siguiendo un arco narrativo de acenso progresivo de la acción hasta el clímax final y adaptándolo en cada momento a las necesidades concretas de la historia.





EL HÉROE

Nuestro protagonista será el arquetipo del héroe del cuento de hadas, y tanto ejercerá funciones de Propp, como seguirá los pasos del monomito de Joseph Campbell en algunos momentos del viaje.

LA AVENTURA

Marcamos el principio y el final como Entorno Inicial y Entorno Final. Los puntos de giro del Planteamiento al Nudo y del Nudo al Desenlace como Gran Daño y Gran Perdida respectivamente o como se prefiera. Los dos puntos de Clímax restantes podemos relacionarlos con la resolución de tramas secundarias que dan un giro a la trama general, como el éxito o el fracaso en pruebas de iniciación,  nuevos peligros o enemigos, subtramas románticas, etc.. y así vamos concretando, sustituyendo cada una de las partes con una definición más precisa, atendiendo a las necesidades de la historia que queramos contar.




1º ETAPA: LA LLAMADA

Entorno Inicial: El mundo Ordinario en el que se mueve nuestro héroe en su día a día.

La Llamada a la Aventura: El suceso que desencadenará el conflicto.

Los Dos Caminos: El mentor muestra al héroe el camino del bien y el villano el camino del mal.

El Rechazo a la Llamada: El héroe rechaza la llamada a la aventura y prefiere no involucrarse.

GRAN DAÑO: El héroe o su entorno sufre un gran daño por parte del villano.

Aceptación de la Llamada: El héroe no lo queda más remedio que aceptar la llamada a la aventura.


2º ETAPA: EL NUEVO MUNDO

Nuevo Entorno: El héroe inicia su viaje para enfrentarse al mal.

El Guardián del Umbral: El héroe se encuentra con el guardián del umbral y será sometido a una prueba.

Fracaso: El héroe fracasa en la prueba.

Nuevos  Aliados: El héroe encuentra nuevos aliados que lo ayudarán.

Éxito y Recompensa: El héroe supera la prueba y es recompensado por ello.

Envidia: Algunos aliados no creen que el héroe sea merecedor de la recompensa.


3º ETAPA: INICIACIÓN

El Mentor: El héroe vuelve a encontrarse con el mentor.

La Iniciación: El héroe comienza el entrenamiento con el mentor.

Las Pruebas: El héroe va superando o no las pruebas de iniciación.

Distracción: El héroe encuentra distracciones que le impiden centrarse en su entrenamiento.

Amor: El héroe se enamora.

Nostalgia: El héroe siente nostalgia de su vida anterior.


4º ETAPA: LA MUERTE

Dudas: El héroe se plantea abandonar la aventura y regresar sin cumplir su objetivo.

Malas Noticias: Surge un imprevisto en el nuevo mundo.

El Falso Aliado: El héroe desenmascara a un traidor.

Enfrentamiento: Un enfrentamiento del héroe con las fuerzas del mal.

GRAN PERDIDA: El héroe sufre una gran perdida.

Muerte Espiritual: El héroe se hunde emocionalmente.

5º ETAPA: RESURRECCIÓN

Apoyo Emocional: El héroe recibe apoyo emocional de un aliado o de su mentor.

Fuerza Interior: El héroe encuentra en su interior el poder necesario para volver a enfrentarse al mal.

Resurrección: El héroe resurge de sus cenizas dispuesto a vencer al villano.

El Bien contra el Mal: El combate a vida o muerte entre el héroe y el villano.

CLIMAX FINAL: El héroe derrota al villano.

Entorno Final: El héroe regresa al mundo ordinario o no.


MENOS ES MÁS

Si las 300 páginas con sus 90.000 palabras aún parecen inalcanzables, siempre podemos reducir nuestro objetivo. En 150 páginas y con 45.000 palabras también podemos desarrollar una buena aventura para nuestro héroe. 


Mauricio Ciruelos
Punto y Seguido