El pasado fin de semana se hizo
público el fallo del jurado de la Edición 2015 de los Premios Platero
organizados por el Club del Libro en Español de las Naciones Unidas en Ginebra.
Este organismo, fundado hace 40 años por un grupo de funcionarios de organizaciones
internacionales ubicadas en esa localidad, tiene como objetivo el fomento de la
literatura, la lengua y la cultura española e iberoamericana, así como de promover el
empleo del idioma español.
Con respecto al fallo en el apartado
de relatos, el jurado en una decisión cuanto menos
discutible, concedió el primer premio al relato Maquillaje para el alma de la autora Paloma L. González, un
bienintencionado alegato ¿contra? la violencia de género con sobreabundancia de
clichés y de lugares comunes. El segundo premio fue para Agua Brava, de Juan José Tapia Urbano, un correcto y efectivo
trabajo de género donde conviven elementos de antiguas novelas de misterio con
una resolución de carácter sobrenatural. El tercer premio fue para nuestro
compañero Miguel Núñez Ballesteros por el relato Lo que Sara recuerda, un trabajo sobre la memoria, lo que prevalece
frente al olvido, sus justificaciones y sus máscaras.
Damos nuestra enhorabuena a los
premiados y especialmente a nuestro compañero de "faenas" y amigo, Miguel.
lee aquí los relatos seleccionados: http://www.clubdellibro.org/act-075.html
lee aquí los relatos seleccionados: http://www.clubdellibro.org/act-075.html
Punto y seguido
¡Felicitaciones Miguel!!!!
ResponderEliminarCorreo enviado al patrocinador del premio Platero 2015
ResponderEliminarSeñores y señoras del jurado:
Estuve leyendo el relato que eligieron como el mejor para el Premio Platero 2015, y francamente me desilusionó primero, mientras lo leía, por la sobreabundancia de clichés y lugares comunes que serían muy criticados en el más elemental de los talleres, y por el desarrollo tan lineal y directo del relato, más apropiado para un artículo periodístico en policiales, que para un relato literario.
Y después que lo finalicé, me indignó el uso oportunista que hace la autora, y también ustedes, de un tema que merece un tratamiento más profundo y serio que la banalización de un premio, opinión esta última muy moderada si la comparamos con la vertida sobre el relato por una amiga, participante de una organización para la defensa de los derechos de las mujeres.
Así que nunca más voy a enviar un relato a ese concurso, y pueden quedarse tranquilos que tampoco voy a volver a molestarlos; lo que hagan con su conciencia, es un problema de ustedes.
Anónimo, cualquier comentario que quieras hacer para el jurado, NO es este el camino. Nosotros NO tenemos NADA que ver.
Eliminarentendemos y compartimos su enfado. decisiones como esta hacen dudar de la imparcialidad de los premios y la reputación de las entidades convocantes.
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